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Curso Básico de La Doctrina Cristiana
Acerca de las clases

El Pacto

Ya en los albores de la historia Dios quiso tratar con el hombre en forma de un pacto o alianza.
La Biblia es el drama de esa alianza. Empieza en el Génesis y termina en el Apocalipsis. Este pacto fue establecido en el Edén, destruido por la desobediencia de Adán, restablecido nuevamente por el hombre, con Noé, Abraham y David; finalmente afirmado otra vez en el Nuevo Testamento por medio de Jesucristo. Por eso es que las dos partes principales de la Biblia se llaman «testamentos». Un término mejor sería «pacto» o «alianza». En ese caso no serían dos pactos distintos (Antiguo y Nuevo) sino uno y el mismo pacto en distintas fases de desarrollo.

A. Definición

El pacto es la disposición de Dios por la cual El, según sus propios términos y voluntad, entra en contacto con el hombre.

B. En sus distintas manifestaciones.

1. En el jardín del Edén. A veces se le llama el pacto de las obras. Los términos del pacto
fueron dictados por Dios solamente. En su soberanía, el Creador desea establecer esta
alianza con la criatura. Aunque no se mencionen específicamente, existían en el Edén
todos los elementos de un pacto.

a. Las partes: Dios y el hombre.
b. La condición: obediencia («no comerás del fruto»).
c. La promesa implícita: la vida eterna («no morirás»).
d. El castigo: la muerte («de cierto morirás»).

2. Después del pecado. La caída trajo la separación entre el hombre y el Dios que se había
aliado con él. Pero la relación de pacto fue restaurada, aunque en forma progresiva.

a. Al primer hombre Dios le prometió un Redentor que permitiría vencer a la
simiente del diablo (Gn. 3:15).

b. Al concluir la catástrofe del diluvio, nuevamente Dios se acercó a Noé y le
informó de su pacto o alianza (Gn. 9:9-11).

c. En Génesis 15 Dios establece el mismo pacto con Abraham y su descendencia.
d. El rey David recibió confirmación divina del pacto de lo cual él mismo testificaen 2a de Samuel 23:5.

e. El profeta Jeremías nos hace saber del futuro desarrollo de ese precioso pacto
(véase Jr. 31:31-33).

3. En el Nuevo Testamento. Durante el período del Antiguo Testamento los creyentes
miraban hacia el futuro; hacia el día cuando viniese alguno de su simiente que cumpliese
los términos del pacto de Dios. Cuando Cristo llegó, la promesa se hizo realidad.

a. Por eso habló Jesús de la sangre del «nuevo pacto», el cual ha sido renovado en
Cristo Jesús, el Sumo Sacerdote.

b. La carta a los Hebreos es una explicación de cómo el pacto ha sido renovado en
Cristo Jesús, el Sumo Sacerdote.
C. Las implicaciones del pacto.

1. Aunque debido al pecado el pacto tomó distinta forma, el hombre continúa bajo la
obligación del pacto que Dios hizo con Adán. Todo ser humano está sujeto a las
condiciones del pacto.

2. Cristo, hombre perfecto, cumplió todos los requisitos del pacto de Dios. Esto explica porqué Jesús se denomina «el camino» en la Biblia. Es por medio de El que el violador del
pacto de Dios puede recibir las bendiciones allí establecidas.

3. Aun en los tiempos del Nuevo Testamento, Dios trata con el hombre en términos de un
pacto o alianza. Es el mismo Dios. Obra de la misma manera. De aquí se desprende la
importancia de la familia, «la simiente» que Dios desea incluir en sus maravillosas
promesas.

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