¿DONAR O RECIBIR SANGRE?
¿QUÉ DICE LA BIBLIA?
En este artículo analizaremos si es correcto o no que un cristiano done o reciba sangre proveniente de otra persona.
Sabemos que grupos como los Testigos de Jehová enseñan que la Biblia prohíbe que una persona pueda donar o recibir sangre mediante una trasfusión, prefiriendo incluso morir antes de recibir una transfusión de sangre. Veamos los pasajes que utilizan para justificar esto:
Génesis 9:4 “Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis.”
Leyendo un poco más de pasaje, vemos que de lo que habla el pasaje es de comer sangre de animales, veamos:
Génesis 9:3-4 “2 El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos, en todo lo que se mueva sobre la tierra, y en todos los peces del mar; en vuestra mano son entregados. 3Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he dado todo. 4 Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis.”
Lo que se prohibió fue comer carne con su vida, es decir carne con sangre, porque sabemos que la vida está en la sangre:
Levítico 17:11 “Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.”
Precisamente la sangre de los animales se usaba en el Antiguo Testamento para la expiación de pecados, no para comerla. Es bastante claro, ni siquiera ese pasaje, utilizado por los Testigos de Jehová, habla de la sangre humana.
Veamos otro pasaje que utilizan para decir que es prohibido donar y recibir sangre:
Deuteronomio 12:23 “Solamente que te mantengas firme en no comer sangre; porque la sangre es la vida, y no comerás la vida juntamente con su carne.”
De nuevo es claro que el pasaje habla de no comer carne con su sangre, leamos un poco más de ese pasaje:
Deuteronomio 12:20-27 “Cuando Jehová tu Dios ensanchare tu territorio, como él te ha dicho, y tú dijeres: Comeré carne, porque deseaste comerla, conforme a lo que deseaste podrás comer. 21 Si estuviere lejos de ti el lugar que Jehová tu Dios escogiere para poner allí su nombre, podrás matar de tus vacas y de tus ovejas que Jehová te hubiere dado, como te he mandado yo, y comerás en tus puertas según todo lo que deseares. 22 Lo mismo que se come la gacela y el ciervo, así las podrás comer; el inmundo y el limpio podrán comer también de ellas. 23 Solamente que te mantengas firme en no comer sangre; porque la sangre es la vida, y no comerás la vida juntamente con su carne. 24 No la comerás; en tierra la derramarás como agua. 25 No comerás de ella, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, cuando hicieres lo recto ante los ojos de Jehová. 26 Pero las cosas que hubieres consagrado, y tus votos, las tomarás, y vendrás con ellas al lugar que Jehová hubiere escogido; 27 y ofrecerás tus holocaustos, la carne y la sangre, sobre el altar de Jehová tu Dios; y la sangre de tus sacrificios será derramada sobre el altar de Jehová tu Dios, y podrás comer la carne. ”
Bastante claro, el mandato dado al pueblo judío en su momento fue no comer la carne de los animales (incluso se dan ejemplos: vacas, ovejas, etc.) juntamente con su sangre. La carne se debía limpiar, tirando la sangre y solamente comiendo la carne. De nuevo se reitera que la sangre se usaba para expiación de pecados en el altar. Nada tiene que ver esto con donar o recibir sangre de otra persona.
Otro pasaje utilizado por ellos para decir que los cristianos que donamos o recibimos sangre pecamos es el siguiente:
<a class="rtBibleRef" href="https://biblia.com/bible/rvr60/1%20Sam%2014.32-33?culture=es" data-reference="1 Sam 14.32-33″ data-version=»rvr60″ data-purpose=»bible-reference» target=»_blank» rel=»noopener noreferrer»>1 Samuel 14:32-33 “ Y se lanzó el pueblo sobre el botín, y tomaron ovejas y vacas y becerros, y los degollaron en el suelo; y el pueblo los comió con sangre. 33 Y le dieron aviso a Saúl, diciendo: El pueblo peca contra Jehová, comiendo la carne con la sangre. Y él dijo: Vosotros habéis prevaricado; rodadme ahora acá una piedra grande. ”
El pasaje por si solo es claro, el pueblo pecó contra Dios por el hecho de comer la carne de animales (ovejas, vacas y becerros) junto con su sangre. De nuevo en ningún momento está hablando de sangre humana y de nuevo habla de comer no de donar sangre a otra persona.
Los Testigos de Jehová incluso van más allá tratando también de usar un pasaje del Nuevo Testamento para justificar que la donación o el recibir sangre está prohibido por Dios:
Hechos 15:28-29 “Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias: 29 que os abstengáis de lo sacrificado a ídolos, de sangre, de ahogado y de fornicación; de las cuales cosas si os guardareis, bien haréis. Pasadlo bien. ”
Al leer el pasaje es claro que lo que dice es que no se debe tomar la sangre de animales sacrificados a los ídolos ni de animales ahogados. Querer agregar interpretación extra a este pasaje es sencillamente querer crear mandamientos de hombres y cargas a las personas.
Al leer textos previos a ese pasaje encontramos más claridad:
Hechos 15: 19-20 “Por lo cual yo juzgo que no se inquiete a los gentiles que se convierten a Dios, 20 sino que se les escriba que se aparten de las contaminaciones de los ídolos, de fornicación, de ahogado y de sangre.”
Vemos que se estaba inquietando a los gentiles (nosotros los no judíos, que gracias a la muerte de nuestro Señor Jesucristo tenemos la oportunidad de ser salvos) y por eso acordaron que nada más se abstuvieran de los sacrificios a ídolos, de comer animales ahogados y de comer sangre.
En este mismo pasaje de Hechos 15, vemos lo que sucedía:
Hechos 15:24 “Por cuanto hemos oído que algunos que han salido de nosotros, a los cuales no dimos orden, os han inquietado con palabras, perturbando vuestras almas, mandando circuncidaros y guardar la ley,”
Esto precisamente es lo que hacen los Testigos de Jehová, tomar ciertas partes de la Ley e imponerlas, como si fuéramos salvos por guardar la ley del Antiguo Testamento y no por gracia.
Al igual que en el Antiguo Testamento las personas realizaban sacrificios de animales derramando la sangre de ellos en el altar para perdón pecados, nuestros pecados son perdonados gracias a que Jesús entregó su vida, su sangre en la cruz para rescatarnos:
1 Pedro 1:18-21 “sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, 19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, 20 ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, 21 y mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios. ”
Confirmamos que la sangre de Cristo nos limpia de todo pecado:
1 Juan 1:7 “pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.”
Los Testigos de Jehová se preocupan demasiado por guardar este mandamiento creado por ellos cuidando su sangre, ignorando que ni sangre ni carne heredarán el Reino de Dios y que nuestros cuerpos seremos transformados y ya no moriremos porque tendremos nuevos cuerpos:
1 Corintios 15:50-58 “Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción. 51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, 52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. 53 Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. 54 Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. 55 ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? 56 ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. 57 Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo. 58 Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.”
Cuando una persona dona su sangre, está salvando la vida de otras personas, recordemos que la vida está en la sangre y no hay mayor amor que dar nuestra vida por otros:
Juan 15:13 “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.”
Los mismos Testigos de Jehová afirman que: “durante el embarazo proteínas del plasma (fracciones sanguíneas) de las mujeres embarazadas pasan de su sangre al sistema sanguíneo independiente del feto.” (tomado del sitio oficial de los Testigos de Jehová, w00 15/6 pág. 31).
Si la donación de sangre está prohibida, ¿Entonces? ¿Se equivocó Dios al crear el proceso de crecimiento de los fetos? Por donde se vea este mandamiento de hombres es completamente absurdo.
Incluso ahora los Testigos de Jehová hablan de aceptar componentes de la sangre (como sucede en el embarazo):
“En cambio, cuando se trata de fracciones de los componentes principales, cada cristiano, tras meditar profundamente y con oración, debe tomar su propia decisión en conformidad con su conciencia.” (tomado del sitio oficial de los Testigos de Jehová, w00 15/6 pág. 31). (La Atalaya, 15 de junio de 2000, Pág.30).
Veamos como esto se confirma en el libro “Manténganse en el Amor de Dios” página número 216, del 2008:
¿Saben qué es lo curioso de eso? Que para poder extraer componentes de la sangre, otra persona primero debe donar esa sangre, para que luego sea procesada y los Testigos de Jehová aprovechen esos componentes (fracciones) de la sangre, es decir al aceptarla aprueban que alguien tuvo que donarla primero, pero al preguntarle si ellos donarían sangre también para que los componentes de su sangre sean procesados de igual forma para otra persona, responden que no se les permite, porque nadie les garantiza que solamente algunos componentes y no toda su sangre será usada para salvar la vida de otra persona, por eso no donan, ni siquiera componentes de su sangre. Qué gran hipocresía hay detrás de éstos mandamientos de hombres.
Conclusión:
Es claro que ninguno de los pasajes utilizados por los Testigos de Jehová para prohibir a sus miembros y criticar a otros cristianos por donar o recibir sangre, no tiene ningún sentido, todos los pasajes hablan número 1 de sangre de animales y número 2 de no comer esa sangre de animales.
Es curioso ver como ellos mismos aceptan que en el proceso natural del embarazo se comparten componentes de la sangre entre feto y madre y que por eso ellos sí pueden aceptar componentes de la sangre de otras personas, pero que a ellos no se les permite donar para ayudar a otros de igual forma. Incluso con amenaza de ser expulsados, como lo vemos en el Atalaya de Julio de 1961, página 415:
Donar sangre es dar parte de nuestra vida (sangre) para otro que lo necesitará para poder vivir. Los Testigos de Jehová obligan a su gente a morir desangrados antes de recibir la ayuda de alguien, esto incluye a los niños que ni siquiera tienen la oportunidad de decidir seguir esos mandamientos de hombres o no.
Incluso los Testigos de Jehová como la gran cosa, se enorgullecen de los niños que dejaron morir por no darles una trasfusión, esto se ve reflejado en la revista llamada Despertad de ellos, donde el 22 de Mayo de 1994 titularon la portada como “Jóvenes que pusieron a Dios en primer lugar” haciendo referencia a los niños que dejaron morir por este mandamiento de hombres exibiéndolos en su portada:
Ha quedado bastante claro este engaño de este grupo de los Testigos de Jehová, si crees que esto es lo único que enseñan en contra de la Palabra de Dios te invitamos a leer muchos artículos donde se desenmascaran este tipo de falsas enseñanzas: Los Testigos de Jehová
Esperamos que este artículo fuera de edificación y a quienes creen en estas enseñanzas les pueda ayudar.
Gracias por leer el artículo completo, hemos intentado exponer la Palabra de Dios sin desviarnos ni a izquierda ni derecha, para ser edificación tanto para cristianos como incrédulos, sin embargo, mientras estemos en este cuerpo y con esta mente humana no comprenderemos en su totalidad los misterios de Dios:
Isaías 55:9 «Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.»
Romanos 11:33 «!!Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! !!Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos!»
Si no estás de acuerdo con alguna postura expuesta en alguno de los artículos, te instamos a orar, pidiendo que el Espíritu Santo sea quien te guíe a la verdad sobre cualquier tema en particular y tú mismo estudies las Escritura pidiendo a Dios que te guíe a la verdad.