Contenido del curso
Teología Bíblica – Clase 2: Protectora y Guía para la Iglesia
Clase esencial Teología Bíblica Clase 2: Protectora y Guía para la Iglesia
0/3
«Señor, esto es una iglesia local»
0/2
Esenciales e indispensables: Las mujeres y la misión de la Iglesia
La contribución de las mujeres a la misión de la iglesia no es sólo «importante» o «vital» o «crítica». Las mujeres son «esenciales e indispensables» para la misión y el ministerio de la iglesia. Así lo afirma la conferenciante y escritora Jen Wilkin, de The Village Church, en Flower Mound, Texas.
0/2
Teología Bíblica
Acerca de las clases

Me pregunto si estás familiarizado con el meme «Señor, esto es un Arby’s». Permíteme ilustrarte:

Persona A [con agravación agresiva]: ¿Puedes creerlo? El otro día, escuché a alguien referirse al libro de Génesis. Seguramente SABRÁS que Génesis no es solo «un libro», sino la primera parte del Pentateuco, y el Pentateuco es un libro quíntuple, no cinco libros. ¿Sabes cuál es la primera palabra en Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio? Es «. ¡BOOM! ¿Cómo llamó Jesús a la Torá? «El libro de Moisés». No los libros de Moisés.

White House, Washington DC

Persona B [lacónicamente]: Señor, esto es un Arby’s.

Eso es todo. Ese es el chiste. El punto es simple: Arby’s no es el lugar para divagaciones desquiciadas acerca de la Torá, y un cajero de Arby’s solo está allí para tomar tu orden y preguntarte si quieres salsa de rábano o no.

Como director editorial de 9Marks, parte de mi trabajo consiste en rastrear el internet cristiano. Por favor, observa que dije rastrear, como en «examinar», no trolear, como en «ser un idiota». Durante los últimos meses de cuarentena e inestabilidad política, he pensado mucho en este meme de Arby’s, en parte porque tiendo a calmar situaciones tensas e irritables con humor, y en parte porque este meme ofrece una interpretación absurda de lo que sucede en nuestras iglesias en el mundo.

Déjame explicar. Mientras yo rastreo, muchas personas trolean. Se encuentran enojadas, incrédulas, hartas, angustiadas e irritadas. ¿Por qué? La manipulación de las estadísticas del Covid-19, la hipocresía de las protestas celebradas por el Estado, la inutilidad de las mascarillas, la brutalidad policial, los crímenes de gente de color contra ellos mismos, los defectos o pecadillos del vicepresidente Biden, los defectos o pecadillos del presidente Trump; el cómo 9Marks es demasiado «despierto», cómo John McArthur tiene sangre en sus manos, cómo cerrar una iglesia es una cobardía y cómo abrirla es valentía.

Peor que trolear en Twitter es cómo ridiculizan a su pastor. Algunos están molestos porque sus pastores no han hecho lo suficiente. ¿Cómo puedes quedarte de brazos cruzados cuando la injusticia racial está en todas partes? Otros están enojados porque sus pastores han hecho demasiado. ¿Cómo pudiste decir eso en tu oración pastoral? ¡¿No conoces los hechos?!

Muchos miembros de la iglesia están felices y contentos, pero muchos otros están ofendidos.

  • Algunos son legalistas. Exigen que su pastor utilice su plataforma para denunciar todo lo que ellos mismos desean denunciar. Quieren usarlo para impulsar y legitimar sus opiniones personales.
  • Algunos son conversadores. Quieren que su pastor medie en conversaciones dentro de la iglesia acerca de varios temas del día. Cuando su pastor decide no organizar ese foro, enseñar esa clase de Escuela Dominical o comenzar ese grupo de lectura, pueden verse tentados a suponer lo peor: a él no le importa; está favoreciendo una opinión por encima de otra.
  • Finalmente, algunos, quizá la mayoría, son más tranquilos. No dicen nada en absoluto, pero se preguntan en silencio por qué el pastor tampoco dice nada, ya sea sobre los problemas en sí mismos, o sobre la manera en que otros miembros hablan de los problemas en línea. Debido a esto, se sienten tentados a desconfiar. Algunos, por supuesto, aprecian el silencio de su pastor. Después de todo, solían asistir a iglesias que tambaleaban tras cada titular como un gato tras un apuntador láser. Fue divertido por un tiempo, pero finalmente todo el ejercicio se volvió agotador e incluso un poco triste.

Entonces, ¿qué hacemos? ¿Cómo respondemos a estos tres tipos y más?

Tengo una idea. Está inspirada en mi amado meme, y pienso que funcionaría en casi todas las situaciones. De manera muy directa, podemos decir: «Hermano, Hermana…esto es una iglesia local».

El punto de la frase es simple: tu iglesia no es el lugar para tal actividad, y tu pastor no es quien debería celebrar todas tus inclinaciones políticas, poniéndolas junto a la Palabra de Dios. Ayudar a tu congregación a entender que «esto es una iglesia», aliviará algo de la presión y hará que nuestras iglesias sean más felices y sanas.

Como escribió recientemente mi amigo Adam Sinnett:

«Por tanto, si bien hay muchas cosas que la iglesia podría hacer, lo que debe hacer es proclamar fielmente el evangelio y cultivar discípulos adoradores como la nueva humanidad de Dios en Jesús. Si bien la iglesia se preocupa profundamente por la política, no es una organización partidista. Si bien la iglesia se preocupa profundamente por los acontecimientos actuales, no es una agencia de noticias que ofrece comentarios culturales en curso. Si bien la iglesia se preocupa profundamente por la virtud, no es responsable de señalar su virtud simplemente para apaciguar a la cultura

La iglesia es una expresión local del nuevo pueblo de Dios, diverso y redimido para un propósito específico: proclamar fielmente el evangelio y cultivar discípulos adoradores para la gloria de Dios. Aunque hay muchas cosas que podríamos hacer, esto es lo que debemos hacer. Este es el latido del corazón de cada iglesia local llena de fe, saturada de la Biblia, dependiente del Espíritu, centrada en Dios y satisfecha en Cristo. Aquí es donde debemos dirigir nuestras principales energías. Esto es lo que deberíamos esperar de una iglesia local sana, ya sea reunida o dispersa».

Creo que tiene razón. En ese sentido, y con algo de ayuda del libro de Efesios, aquí tienes tres cosas que quieres que tus miembros sepan por el bien de la unidad de nuestro evangelio, en tiempos de división política.

Bookmark