Manual para Evangelismo Cristiano
Acerca de las clases

Parte 2 Cómo hacer la obra personal con los Pecadores

PARTE II

Cómo hacer la obra personal con los Pecadores que se sienten Convictos del pecado

  1. Encarézcanles el arrepentimiento.

Hechos 26: 20.

“Que se arrepintiesen y se convirtiesen a Dios haciendo obras dignas de arrepentimiento.”

Lucas 13: 3.

“Si no os arrepintiereis, todos pereceréis igualmente.”

El verdadero arrepentimiento incluye la restitución. He allí a Zaqueo arrepentido, diciendo:

Puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. Lucas 19: 8-9.

  1. Exhorten a que crean en Cristo como su Salvador personal.

Romanos 10: 9-10.

“Si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia; más con la boca se hace confesión para salvación.”

Juan 3:16-18.

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo Para que condene al mundo, más para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; más el que no cree, ya es condenado, porque no creyó en el nombre del unigénito Hijo de Dios.”

  1. Insisten a que confieren a Cristo sin demora.

1 Juan 1: 9.

“Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.”

Romanos 10: 9-10.

“Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.”

Mateo 10: 32-33.

“A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos. Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.”

  1. Hagan comprender la necesidad de la obediencia.

Juan 14: 15.

“Si me amáis, guardad mis mandamientos.”

1 Juan 2: 4-6.

“El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo.”

Mateo 10: 37-38.

“El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.”

Los que, arrepentidos, creen en Jesús como su Salvador, le deben confesar con la boca y además en la obediencia, en el bautismo y en su servicio.

Romanos 10: 11.

“En verdad, todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.”

Romanos 9: 33.

“Como está escrito: He aquí pongo en Sion piedra de tropiezo y roca de caída; Y el que creyere en él, no será avergonzado.”

Cristo es el cumplimiento  de esta profecía.” “El bautismo es mandamiento del Señor.”

Mateo 28: 19.

“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.”

Hechos 10: 48.

“Y les mandó bautizar en el nombre del Señor Jesús.”

Es parte de la unidad de la fe.”

Efesios 4:4-6.

“Un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación; un Señor, una fe, un bautismo, un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos.”

Es una sepultura en agua del nuevo creyente.”

Romanos 6: 4.

“Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.”

Hechos 8: 36-39.

“Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco: Aquí hay agua; ¿qué impide que yo sea bautizado?   Felipe dijo: Si crees de todo corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios. Y mandó parar el  carro;  y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó. Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino.”

Marcos 1: 9.

“Aconteció en aquellos días, que Jesús vino de Nazaret de

Galilea, y fue bautizado por Juan en el Jordán.”

Colosenses 2: 12.

“sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos.”

Es un hermoso símbolo.

Simboliza:

(1) la muerte al pecado y la nueva vida.

Romanos 6: 1-4.

“¿Qué pues diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde? En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él? ¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.”

(2) el lavamiento en la sangre.

1 Pedro 3: 21.

“El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no quitando  las  inmundicias  de  la  carne,  sino  como  la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) por la resurrección de Jesucristo.”

Hechos 2: 38.

“Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.”

Hechos 9: 17-18.

“Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo. Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose, fue bautizado.”

Hechos 22: 16.

“Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre.”

Además simboliza: (3) la resurrección.

Romanos 6: 5, 8-9.

“Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección; y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con él; sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la muerte no se enseñorea más de él.”

Colosenses 2: 12.

“Sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos.”

“El bautismo también es una confesión.

(1) De pecados. Marcos 1: 5. Y eran todos bautizados por él en el rio de Jordán confesando sus pecados.

(2) De fe. Hechos 2: 41. Los que recibieron su palabra, fueron bautizados.

(3) De nuevos propósitos. Romanos 6: 11. Así también vosotros, pensad que de cierto estáis muertos al pecado, más vivos a Dios en Cristo Jesús Señor nuestro.

(4) De unión con Cristo. Gálatas 3: 27. Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis vestidos.

(5) De una buena conciencia. 1era de Pedro 3: 21. «El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no quitando las inmundicias de la carne, sino como la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) por la resurrección de Jesucristo.

(6) De Lealtad a Cristo. Mateo 28: 20. Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.»

“El bautismo no salva a nadie, pero es el deber de todo creyente   bautizarse   conforme   a  lo   mandado   por nuestro Señor Jesucristo.

 

 

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