Conociendo a los niños

El aspecto Espiritual del niño
1. El niño necesita ser salvo durante su niñez. La Biblia enseña que cuando un niño ha
pecado voluntariamente, necesita recibir a Cristo para el perdón de sus pecados. El
niño que ha pecado y no ha recibido a Cristo está perdido.
2. Responde fácilmente a Dios. La infancia es el momento escogido por Dios y es
cuando se les presenta el Evangelio correctamente.
3. Es crédulo. Recibe sin duda las verdades de Dios Padre, de Jesucristo, del Espíritu
Santo y de la Biblia.

4. Su decisión para recibir a Cristo es real, seria y bíblica.
5. Cuando recibe a Cristo como su Salvador, es un creyente verdadero.
6. Es capaz de ser un discípulo de Jesús creciendo hacia la madurez espiritual con
verdadera fidelidad en oración, adoración y servicio.
El Aspecto Mental del Niño.
1. Presta atención por un tiempo corto; es fácilmente distraído. La atención del niño
sigue la fórmula, que llamamos la Regla de 1×1, la atención de los niños de 1×1, es
decir, un minuto por cada año de edad.
Ejemplo.
5 años = 5 minutos 8 años = 8 minutos
10 años = 10 minutos 12 años = 12 minutos
2. Aprende principalmente por medio de los cinco sentidos (oído, vista, gusto, olfato y
tacto) conocidos como las cinco puertas del aprendizaje infantil.
3. Aprende mucho más participando plena y continuamente. Por ejemplo, por medio de
actividades variadas o trabajos manuales bien planeados y coordinados con la enseñanza
directa. Un niño aprende un 20% de lo que escucha, un 50% de lo que ve y escucha y
hasta un 90% haciendo algo, por que participa utilizando varios de sus cinco sentidos.
El Niño en su Aspecto Físico.
1. Es activo y enérgico gozando de mucha energía física. Por eso es muy negativo en el
ministerio infantil tener muchas actividades en que tienes que decirles a los niños que
deben de quedarse “sentados, quietos, sin moverse, calladitos”.
2. Le encanta competir con los demás.
3. Necesita un tiempo de descanso. Dentro de cada programa del ministerio infantil, de
preferencia cada 30 o 45 minutos, debe haber un descanso. Puede ser unos minutos de
juegos planeados para enseñar, un paseo, un desfile pequeño, un coro con ademanes o
música cristiana con ejercicios aeróbicos.
4. Tiende a ser muy inquieto. se aburre o se cansa. Cuando los niños están inquietos es
una señal que los maestros no han reconocido la regla de atención de 1×1 o que la
enseñanza no les es muy interesante. Por eso los métodos de cambio rápido (cada 10
minutos o menos se debe cambiar de métodos, actividades y ayudas visuales) y
variedad completa (que no se repita ningún método más de una vez cada 30 o 45
minutos) son tan importantes en la enseñanza infantil.

5. Es juguetón. Los juegos organizados y bien planeados son métodos positivos para
enseñar algo a los niños, así como un parte normal del desarrollo sano físico del niño.