HISTORIA DE LA DANZA.
En los pueblos antiguos la danza tenía un significado mágico religioso, no exento de un contenido social e incluso espectacular.
Aparece en diferentes culturas; en Egipto, entre los etruscos y fenicios, entre los griegos y romanos, y en oriente, donde se cultivó con gran intensidad.
En esta época, sobresalen las danzas cortesanas: pavana, gallarda, courente, alemanda, gavota, bourée, pasa, calle, giga, chacona, y zarabanda.
La edad media es fecundada por la aparición de diversas formas de danza.
Casi siempre de significado popular a lo largo de la historia moderna.
Las danzas tradicionales europeas tienden a pasar a los salones aristocráticos y a las cortes de los monarcas, y desde aquí, a la música instrumental.
A partir de entonces ejercen una poderosa influencia sobre la música.
En el siglo XIX las danzas más importantes son el vals, la polca, el chotis, y la mazurca. El siglo XX está dominado por los ritmos relacionados con el jazz, y en general por los de procedencia afrocubana.